25 agosto 2018

Baúl de memorias y pensamientos.

DÍA 2: Una reflexión que me provoca una vivencia... no una, muchas: a lo largo de mi vida, la contemplación de la naturaleza me ha provocado admiración, paz, más de una epifanía... eso sí, en mi caso ello no me ha llevado a ser una entusiasta practicante de trekking (por una buena dosis de pereza) u otra disciplina deportiva de las que te acercan a la tierra, al agua o al viento. Pero sí soy una maravillada observadora pasiva...

- Mi mamá me ha contado más de una vez una mini historia: a los tres o cuatro años (no recuerdo para nada lo que ella me cuenta) llegamos a orillas de un río, yo con mis chapes, morenita, abro los brazos y me dispongo a respirar a todo pulmón el maravilloso aire puro del lugar. expresando en mi lenguaje de niña la felicidad que sentí en aquel momento.
- Contemplando las huertas de mis abuelas, sin "meter las manos" en su momento, sin preguntar casi nada, perdiéndome así la preciosa oportunidad de que me transmitiesen directamente sus saberes. Pero quiero rescatarlos a través de un aprendizaje en huerta y cocina.
- Observando atenta, cada vez que íbamos a ver a mi abuela materna, la belleza de los cerezos en flor.
- Disfrutando, cuando podía y hasta ahora, cuando puedo, de las puestas de sol en la playa...
- Impregnándome del verde Sur de nuestro país (aún no conozco el dorado Norte)

Lo descrito también me ha generado un compromiso con el cuidado del medio ambiente, digamos, "nivel medio", porque sé que podría hacer mucho más. Gracias Dios, por la Creación; Gracias Universo, por tanta maravilla...

22 agosto 2018

Baúl de memorias y pensamientos ( I )

Ya se inició,  para mí, la cuenta regresiva para una nueva cumplevida, cumpleaños, o como se dice ahora y suena tan bonito, "vuelta al sol". Tomando ideas que he visto o leído por ahí, un pensamiento  o una memoria hasta que llegue el día en cuestión.

DIA 1: Un olor que me hace evocar un recuerdo inmediatamente: en mi infancia ochentera, casi todos los fines de semana recorríamos medio Santiago para ir a ver a mis abuelos paternos, ambos de raíces sureñas. Mi abuelito trabajaba en el Café Paula, y en ocasiones llevaba una torta hecha por él para la once... delicia! Y mi abuelita, con un par de horas de anticipación a la hora del té, comenzaba a preparar el pan amasado más rico que he probado, de verdad. Y el "olor-recuerdo" es justamente el del pan amasado calientito, recién salido del horno, al ser partido momentos antes de echarle la mantequilla... Gracias, abuelos.