26 febrero 2018

Escribir.

Me parece increíble que en tantos meses no me haya sentado, así, sen-ta-do, a escribir. Dejé que la vida pasara... viviéndola, sí, pero sin destinar un tiempo a una de mis actividades favoritas.

Dije "actividades"? Creo que ya está bueno ya... escribir para mí no sólo es eso... Lo que ocurre es que yo siempre me he visto a mí misma como una simple lectora, y a los escritores como personas a las que sólo admiraba de lejos. 

Pero no estoy arrepentida para nada de haber estudiado Derecho, y no algo quizás más orientado directamente a las Letras, porque obedeció también a un sueño (cual Quijote, luchar contra las injusticias), y si la vida me depara volver, de algún modo, a esta área, también eso estará muy bien.

"Escribir me suele alegrar; siempre me suaviza el ánimo y me regala un día ingenuo, tierno, infantil. Es la sensación de haber estado por unas horas en mi patria real, en mi costumbre, en mi suelto antojo, en mi libertad total." ("Cómo escribo". Extracto de texto en prosa de Gabriela Mistral).

No hay comentarios.: