29 septiembre 2010

Encuentros cercanos.

Creo - es pura cuestión de fe en mi caso - que "no estamos solos en el universo"; quizá influyó demasiado en mí el libro "Ami, el niño de las estrellas" - el cual recomiendo a todos los niños entre 9 y 12 años, como también a los niños de corazón, no como una joya literaria, pero sí en atención a su hermoso y sencillo mensaje: la ley fundamental del universo es el Amor - en fin...
Es del caso que he vivido experiencias de "encuentros cercanos", hace bastante tiempo:
1) Era de noche en una playa del litoral central; caminábamos con mi familia por la costanera cuando pudimos ver en el cielo una luz similar a la de un avión, pero que no titilaba, era fija. Esa luz cruzó rápidamente el cielo de un extremo a otro y luego desapareció. Quedamos plop.
2) Una noche en un campamento de verano vimos un objeto similar a una nube, pero más compacto. Los que lo vimos nos asustamos, porque en pocos segundos creció un poco de tamaño y parecía acercarse a nosotros, hasta que se desvaneció.
Puede que no parezcan casos muy contundentes, pero fue lo que viví. Es increíble que haya personas que se dedican a estudiar estos fenómenos; el tema da para todo: crédulos y escépticos, incluso fanáticos. Yo, como soy crédula, espero ver algun día otro OVNI, y por qué no, conocer a algún extraterrestre, ja, ja.